40 y 20

El capítulo de hoy es para dos mujeres, bueno… Una mujer y una joven, que no pasaron por mi vida sino como una enseñanza más de que no se puede creer en el amor… Entre una mujer o jovencita de Cuba y un hombre sin dinero, sin buena posición social, sin auto, sin moto (motorina)… Y sin «patas». Esa canción que dice: 40 y 20… Hace alusión a otras circunstancias, no a los casos que hoy nos ocupan. En fin, vamos al caso # 1. La primera fue una mujer de unos 40 y algo… Madre, profesional graduada de nivel superior y educadora… Ante la primera charla «informal» que sostuve con ella (personalmente) su respuesta no se hizo esperar y fue muy directa: no me interesa conocer a alguien, no estoy para eso… Una pausa y remató: yo tengo una relación… Ok. Luego la vi con un señor de baja estatura y cola de caballo en su cabello (también profesor o graduado universitario). Aclaro que no siempre, estas mujeres buscan o aceptan hombres educados o graduados. La segunda fue una joven de 2do (estudiante de 19 o 20 años) que parecía una chica tierna, inocente, dulce y delicada…